miércoles, mayo 28, 2008

Será mañana, entonces.
A las diez.
Conduciré hasta la lengua de piedra, cubierta por la pleamar.
Habrá suave poniente, periodo ancho, mar pequeño, coeficiente mediano.
Llevaré bocadillos y prismáticos.
Estaré allí con las manos en los bolsillos antes de que empiece. Desayunaré despacio, no tengo ninguna prisa, no se me va a escapar esta vez.
Es jueves, todos trabajan o fingen que trabajan.
La última serie de la temporada, blandengue y verde, me pertenece.
A mí.
Sin neopreno.
Sin rivales.


[el dibujo es de http://wavetoon.blogspot.com/, un sitio divertido de Brasil al que hay que ir]

2 comentarios:

Anónimo dijo...

Yo prefiero:

"Será el 30 de julio, entonces.
A las diez.
Conduciremos hasta la lengua de piedra, cubierta por la pleamar.
Habrá suave poniente, periodo ancho, enorme mar, coeficiente mediano.
Llevaremos bocadillos y prismáticos.
Estaremos allí con las manos en los bolsillos antes de que empiece. Desayunaremos despacio, no tenemos ninguna prisa, no se nos va a escapar esta vez.
Es verano, algunos trabajan o fingen que trabajan.
La primera serie de la temporada vicentina, azul - muy azul - nos pertenece.
A mí. A ella.
Sin neopreno.
Sin rivales."

Quedan 2 meses y 1 día.

C

Pablo Gutiérrez dijo...

¡Sí, sí, sí, entusiasta sí! Allí-el mar-nunca-stop.
Tic tac, tic tac, dos meses, medio día.