Hace tiempo que no entiendo nada de lo que ocurre.
O tal vez sí, tal vez todo está muy claro y resulta que soy yo quien tiene antiguos arquetipos en mi cabeza que no sirven para comprender lo que sucede.
jueves, septiembre 16, 2010
martes, septiembre 14, 2010
viernes, septiembre 10, 2010
Ayer se aprobó la reforma laboral.
Hoy han entrevistado en la SER a Zapatero, una inusual entrevista realizada por Carles Francino, Monserrat Domínguez, Gemma Nierga y Àngels Barceló.
De todos ésos sólo me creo a Monserrat Domínguez.
En contra de lo acostumbrado, hubo cierta mordiente por parte de los entrevistadores.
Cierta.
Ya sabemos que en España lo habitual es convertir las entrevistas en mítines donde el invitado cuenta con toda la cancha para eludir el ácido.
Quién se atreve a repreguntar.
Quién se atreve a decir usted miente, usted dijo lo contrario hace tres meses, usted no quiere contestar a mis preguntas.
Hay muchos motivos por los que abominar del periodismo anglosajón pero estoy convencido de que ninguno de nuestros políticos se sometería a un Hard Talk de la BBC. http://www.youtube.com/watch?v=B00qgKnz-uU
No sabrían qué contestar cuando les repitieran tres veces la misma pregunta.
Temblarían.
Clea me cuenta que leyó en algún sitio una propuesta para que en las próximas elecciones los votos en blanco computen.
Sumados los votos en blanco necesarios para alcanzar un escaño, ese escaño desaparecería.
Fuera dietas.
Fuera pensiones.
Fuera sueldos.
Fuera añadiduras por comisiones, etcétera.
Muchas veces pienso en cosas como ésta.
Pero me da pereza esperar a las próximas elecciones, en mis fantasías prefiero acciones más eficaces.

Quien crea que exagero puede olisquear qué se esconde detrás de la reforma laboral.
Y preguntarse, también, cómo es posible que los sindicatos convoquen una huelga general del modo que lo han hecho, susurrando y a tres meses vista.
Hoy han entrevistado en la SER a Zapatero, una inusual entrevista realizada por Carles Francino, Monserrat Domínguez, Gemma Nierga y Àngels Barceló.
De todos ésos sólo me creo a Monserrat Domínguez.
En contra de lo acostumbrado, hubo cierta mordiente por parte de los entrevistadores.
Cierta.
Ya sabemos que en España lo habitual es convertir las entrevistas en mítines donde el invitado cuenta con toda la cancha para eludir el ácido.
Quién se atreve a repreguntar.
Quién se atreve a decir usted miente, usted dijo lo contrario hace tres meses, usted no quiere contestar a mis preguntas.
Hay muchos motivos por los que abominar del periodismo anglosajón pero estoy convencido de que ninguno de nuestros políticos se sometería a un Hard Talk de la BBC. http://www.youtube.com/watch?v=B00qgKnz-uU
No sabrían qué contestar cuando les repitieran tres veces la misma pregunta.
Temblarían.
Clea me cuenta que leyó en algún sitio una propuesta para que en las próximas elecciones los votos en blanco computen.
Sumados los votos en blanco necesarios para alcanzar un escaño, ese escaño desaparecería.
Fuera dietas.
Fuera pensiones.
Fuera sueldos.
Fuera añadiduras por comisiones, etcétera.
Muchas veces pienso en cosas como ésta.
Pero me da pereza esperar a las próximas elecciones, en mis fantasías prefiero acciones más eficaces.

Quien crea que exagero puede olisquear qué se esconde detrás de la reforma laboral.
Y preguntarse, también, cómo es posible que los sindicatos convoquen una huelga general del modo que lo han hecho, susurrando y a tres meses vista.
miércoles, septiembre 08, 2010
Vuelvo, camino de puntillas con la luz apagada.
Todo lo encuentro sucio y desolado aquí.
Hace tanto, miro la fecha en la que esto quedó interrumpido como el reloj que se detiene en el instante de la explosión, miro la fecha y me sorprende cuánto tiempo ha pasado.
Cuánto.
Pero luego pienso en toda la sustancia que llenó este vacío, en los días, las noches, los desvelos, las sonrisas formidables, y entonces esa fecha apenas es un anteayer, tiempo geológico sería necesario para narrar y explicar y fotografiar todo lo que ha sucedido desde el insolente miércoles, agosto 19, 2009 de ahí abajo.
No sé qué decir.
Si contara sin metáfora (¿podría?) algo acerca de eso me saldrían cosas bobas y cursis.
Por eso mejor no decir nada.
Y muchas veces digo que si no encuentras la palabra exacta, si no puedes generarla tú es mejor que busques entre las que otros más sabios ya dijeron.
Esto se interrumpió con un goytisolo.
Goytisolo sirve para decir ee-oo! , de nuevo. Este poema es mi reflejo, por eso acudo tantas veces a él.
"En la habitación
de al lado
en la misma
habitación
que hasta hace poco
era mía
rodeada de los mismos
libros, en las
mismas librerías,
mirando los mismos
cuadros, sobre las
paredes mismas,
toda asombro
vida, ojos,
amor, manos,
alegría,
canta y juega,
ríe, ríe,
una niña, una
niña. "
José Agustín Goytisolo
Todo lo encuentro sucio y desolado aquí.
Hace tanto, miro la fecha en la que esto quedó interrumpido como el reloj que se detiene en el instante de la explosión, miro la fecha y me sorprende cuánto tiempo ha pasado.
Cuánto.
Pero luego pienso en toda la sustancia que llenó este vacío, en los días, las noches, los desvelos, las sonrisas formidables, y entonces esa fecha apenas es un anteayer, tiempo geológico sería necesario para narrar y explicar y fotografiar todo lo que ha sucedido desde el insolente miércoles, agosto 19, 2009 de ahí abajo.
No sé qué decir.
Si contara sin metáfora (¿podría?) algo acerca de eso me saldrían cosas bobas y cursis.
Por eso mejor no decir nada.
Y muchas veces digo que si no encuentras la palabra exacta, si no puedes generarla tú es mejor que busques entre las que otros más sabios ya dijeron.
Esto se interrumpió con un goytisolo.
Goytisolo sirve para decir ee-oo! , de nuevo. Este poema es mi reflejo, por eso acudo tantas veces a él.
"En la habitación
de al lado
en la misma
habitación
que hasta hace poco
era mía
rodeada de los mismos
libros, en las
mismas librerías,
mirando los mismos
cuadros, sobre las
paredes mismas,
toda asombro
vida, ojos,
amor, manos,
alegría,
canta y juega,
ríe, ríe,
una niña, una
niña. "
José Agustín Goytisolo
miércoles, agosto 19, 2009
Lo peor
Lo malo no es contemplar a un perro atropellado
junto a la cinta gris de la autopista
que se incorpora todavía vivo y anhelante
sobre sus patas delanteras
y luego con vergüenza apercibirte
que la visión te devuelve la imagen de un niño bombardeado.
Lo malo lo peor
es creer que tu cerebro
funciona de igual modo que una computadora
y urdir muy hondas especulaciones
sobre el hombre considerado
como un animal cibernético
sin pararte a pensar
que es el ordenador el que está hecho
rudimentariamente
a tu imagen y semejanza.
José Agustín Goytisolo
Lo malo no es contemplar a un perro atropellado
junto a la cinta gris de la autopista
que se incorpora todavía vivo y anhelante
sobre sus patas delanteras
y luego con vergüenza apercibirte
que la visión te devuelve la imagen de un niño bombardeado.
Lo malo lo peor
es creer que tu cerebro
funciona de igual modo que una computadora
y urdir muy hondas especulaciones
sobre el hombre considerado
como un animal cibernético
sin pararte a pensar
que es el ordenador el que está hecho
rudimentariamente
a tu imagen y semejanza.
José Agustín Goytisolo
miércoles, julio 29, 2009
Leyendo esto de Isaac Rosa recuerdo los versos de Celaya,
"Todas las mañanas, cuando leo el periódico
me asomo a mi agujero pequeñito.
Fuera suena el mundo, sus números, su prisa,
sus furias que dan a una su zumba y su lamento.
Y escucho. No lo entiendo.
Los hombres amarillos, los negros o los blancos,
la Bolsa, las escuadras, los partidos, la guerra:
largas filas de hombres cayendo de uno en uno.
Los cuentos. No lo entiendo.
Levantan sus banderas, sus sonrisas, sus dientes,
sus tanques, su avaricia, sus cálculos, sus vientres
y una belleza ofrece su sexo a la violencia.
Lo veo. No lo creo.
Yo tengo mi agujero oscuro y calentito.
Si miro hacia lo alto, veo un poco de cielo.
Puedo dormir, comer, soñar con Dios, rascarme.
El resto no lo entiendo."
Yo tampoco entiendo nada, la estupefacción es superior al dolor de tripa, todo es tan feo y hostil, todo lo que circunda a esta playa pequeñita, agujero en el mundo, sumidero donde se pierde esa tunda terrible. Sí, ya sé, me pasa lo mismo que a todos. No hay donde poner el ojo sin que sangre. A oscuras, mejor, y a tientas.
Y luego en cambio ocurren cosas extrañas: en el interior de Clea algo se produce de un modo suave y perfecto, un chico de dieciséis decide en 2009 comenzar a escribir a máquina, porque encuentra que el carro de tinta tiene más víscera que el blanco documento de Word, y le salen experimentos pasmantes como éste:
"Todas las mañanas, cuando leo el periódico
me asomo a mi agujero pequeñito.
Fuera suena el mundo, sus números, su prisa,
sus furias que dan a una su zumba y su lamento.
Y escucho. No lo entiendo.
Los hombres amarillos, los negros o los blancos,
la Bolsa, las escuadras, los partidos, la guerra:
largas filas de hombres cayendo de uno en uno.
Los cuentos. No lo entiendo.
Levantan sus banderas, sus sonrisas, sus dientes,
sus tanques, su avaricia, sus cálculos, sus vientres
y una belleza ofrece su sexo a la violencia.
Lo veo. No lo creo.
Yo tengo mi agujero oscuro y calentito.
Si miro hacia lo alto, veo un poco de cielo.
Puedo dormir, comer, soñar con Dios, rascarme.
El resto no lo entiendo."
Yo tampoco entiendo nada, la estupefacción es superior al dolor de tripa, todo es tan feo y hostil, todo lo que circunda a esta playa pequeñita, agujero en el mundo, sumidero donde se pierde esa tunda terrible. Sí, ya sé, me pasa lo mismo que a todos. No hay donde poner el ojo sin que sangre. A oscuras, mejor, y a tientas.
Y luego en cambio ocurren cosas extrañas: en el interior de Clea algo se produce de un modo suave y perfecto, un chico de dieciséis decide en 2009 comenzar a escribir a máquina, porque encuentra que el carro de tinta tiene más víscera que el blanco documento de Word, y le salen experimentos pasmantes como éste:
Como dice el de arriba, Sr. Director del Consejo de Administración, váyase usted a un carajo medianamente hermoso, le concedo lo de hermoso. Mientras, nosotros, los demás, seguiremos jodidos pero felices en el tránsito de buscar las cosas que nos hacen olvidarnos de usted.
domingo, julio 05, 2009
Antecedentes: Clea y yo leemos Público porque detestamos El País (los motivos se explicaron muchas veces en este blog), porque Rafael Reig nos hace reír y porque, en ocasiones, regalan libros de Miguel Hernández, y eso nos parece un gesto tan tierno que no podemos resistirnos. También porque se atreven a dejar que, hablando del rey, alguien diga "hay españoles que son simplemente imbéciles; yo no tengo cultura de vasallaje y no admito humillarme ante un señor que no ha sido elegido democráticamente. " Busquen algo parecido en otro lado. Es triste, pero no lo encontrarán. Encontrarán mucho acerca de la elegancia de Letizia, en cambio, pero ese es un asunto que también gasté en otras ocasiones.
Recupero el hilo. Dentro de las cosas que buscábamos en Público solía estar la columna malhumorada de Javier Ortiz. Utilicé algunas con los bachilleres este año, viva la contrapropaganda, reciben tantos aguijonazos del otro lado.
Pero hace un par de meses esas columnas desaparecieron. Se borraron.
Y pronto supimos que Javier Ortiz había muerto.
Había muerto.
Hoy, junto antes de irnos de viaje, Clea me deja leer el autobituario que Ortiz escribió.
Y me ha hecho reír,
y me he estremecido,
y me ha entrado un miedo atroz.
Recupero el hilo. Dentro de las cosas que buscábamos en Público solía estar la columna malhumorada de Javier Ortiz. Utilicé algunas con los bachilleres este año, viva la contrapropaganda, reciben tantos aguijonazos del otro lado.
Pero hace un par de meses esas columnas desaparecieron. Se borraron.
Y pronto supimos que Javier Ortiz había muerto.
Había muerto.
Hoy, junto antes de irnos de viaje, Clea me deja leer el autobituario que Ortiz escribió.
Y me ha hecho reír,
y me he estremecido,
y me ha entrado un miedo atroz.
Suscribirse a:
Entradas (Atom)