miércoles, julio 02, 2008

Zavial, la pleamar de esta mañana.


Techumbres muy longueras.


Pero tan cerca, auch, de las rocas.


De vuelta de la primera escala. Quemado, molido, exhausto: feliz.

Verano largo y blanco, de niño pequeño.

7 comentarios:

Anónimo dijo...

Pues prepárate para la segunda escala: más quemado, más molido, más exhausto y, por supuesto, más feliz.

Es lo que tiene P, que nunca nos defrauda. Y es lo que tiene E, que nos hace poner mohínes.

Esta escapada a toda velocidad - huimos 20 minutos después de que tocara el timbre de salida - de cuadernos, alumnos, informes y, especialmente, de profesores sólo es la preparación para esas dos semanas que nos esperan llenas de vino - al menos 7 botellas -, bikinis, sol y mar. Síííí y olas.

Estupendo el comienzo. Impaciente por lo que queda.

C

Anónimo dijo...

el paraiso das ondas!
son perfeitas!

Lara dijo...

Uf!!!
No sé si es bueno para la salud ver esos pies tuyos ahí tumbados con esos arbustos fuera que yo también reconozco.
Pero sí, seguro que lo es, aunque ya haga frío cuando yo me escape (porque en septiembre rompo la lanza-oficina, por fin).
¿Viste tu crítica de hoy en el periódico?
¿Allí existen las críticas y los periódicos?

Un abrazo...

Pablo Gutiérrez dijo...

Veinte minutos después del timbre y siete botellas... chica, tenemos un grave problema con ese asunto. Cambiemos algunas por bikinis, sí.
Me llegó el aviso y el periódico: todo es muy extraño y no sé nunca qué pensar de esto. Mientras lo decido, voy riéndome.
¡Y lanza, lanza lejos esa lanzaoficina, mujer!

NáN dijo...

pues anda que no tienes suerte ni nada, tan cerca de los ca�averales. Con las olas. Con tiempo. Con una mesa para poner los pies exactamente del modo contrario a como lo hac�an bush y aznar.

Miguel Marqués dijo...

Yo envido los pleamares y los cañaverales. Rocas de las que duelen tenemos a paladas aquí atrás, tras el jardín, pero las queremos: tienen tacto cálido y son amplias y llanas y te agarran de los pies para que puedas asomarte al valle.

¡Lara y yo nos hemos hecho medio montañeros!

Pero, ah, la pleamar y los cañaverales. El verano, largo y blanco.

¡¿Y qué dice la crítica?! ¿Dónde salió?

Un abrazo mesetario y de zarza, carrizo y nube.

TeamWorker dijo...

Super photos! Gratuliere. Hi: http://nikkmentor.blogspot.com