lunes, enero 30, 2012

Para conmemorar el bicentenario del nacimiento de Charles Dickens, el gobierno de Portugal, país tradicionalmente anglófilo, ha puesto en marcha una gigantesca perfomance que tiene como objetivo hacer entender a la población el sufrimiento que padecían los personajes de Dickens en su combate contra la miseria y la explotación laboral.
Así, se han decretado la desaparición de las pagas extraordinarias, el aumento del IVA, la reducción de las vacaciones y la ampliación de la jornada laboral.
Esta agresiva y revolucionaria estrategia de animación a la lectura permitirá que los lectores portugueses cuenten con referentes exactos cuando lean Oliver Twist, David Copperfield o, si se atreven, Grandes Esperanzas.
El flamante ministro de cultura del nuevo gobierno español ha mostrado su interés por estas iniciativas, y no descarta desarrollar unas medidas similares en cuanto termine de escrutar el calendario en busca de efemérides interesantes. Se postulan la fecha de publicación de Guzmán de Alfarache, el regreso de Fernando VII y el aniversario de Genghis Khan.

1 comentario:

Begoña Argallo dijo...

Espero que como estamos en democracia se nos permita escoger: Leer a Dickens es siempre avanzar.
En cambio las medidas que se proponen son siempre retroceder.
Me pido leer a Dickens, es uno de mis autores favoritos ;)
Saludos