lunes, febrero 12, 2007

El producto que ofrecía Athenas.co era tan sencillo que podía describirse en las veinte palabras de que encajaban en la cuadrícula de un anuncio clasificado de El País: vuelo Madrid-Moscú, alojamiento en hotel de tres estrellas, SEXO, vídeo de recuerdo, vuelo Moscú-Madrid: 1000 €. A continuación aparecía una dirección postal, un número de identificación fiscal y un teléfono de Barcelona. El precio incluía el transporte desde el aeropuerto hasta el hotel y un seguro de viaje. Había que ingresar la cantidad diez días antes en una cuenta corriente de La Caixa, según la joven de acento catalán que te informaba diligentemente de las fechas de los vuelos y las condiciones de pago, sin nada de espera un ratito miamor, musiquitas, carruseles de contactos ni contestadores automáticos.

Lo que nadie te dijo fue que en el vídeo saldrías con cara de tonto.

5 comentarios:

Anónimo dijo...

Pero, ¿tonto cabreado?
¿o tonto encantado?
¿o tonto gilipollas, como yo la mayor parte de las horas de la mayor parte de los días de casi todos los años de esta única, y en avanzado estado de pauperrización, vida mía?

¡un buen texto para abrir la mañana!

Lara dijo...

Qué bueno.

Anónimo dijo...

Pero creo que el Soho-sex-London-trip no tiene nada que envidiarle al Athenas.co. Cinco chicas, a elegir una, cinco españolitos asustados sentados en un sofá pegajoso - normal en Londres pero ya en un local del Soho diría que casi peligroso -, una angry receptionist y un guante de cuero con estupendos pinchitos convierten una noche cualquiera en la ciudad-pollo (O'Dogherty, qué bueno) en una inolvidable - por no decir "entrañable a la vez que dantesca" - anécdota con la que endulzar bodas, bautizos y comuniones varias.

Luuf P.

Pablo Gutiérrez dijo...

También hice fotos. Si quieres las adjunto en la próxima entrada.

Anónimo dijo...

Algún día tenía que encontrarte. Aún no sé cómo he llegado hasta aquí.

Un beso. Me llamarás pronto?