Para los que se sintieron
los bebés más tristes del jardín de infancia
escribo esta ensimismada correspondencia.
Por fin tendréis, pequeñines,
alguien con quien jugar
a vuestro antojo.
martes, noviembre 07, 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario